Motivos

*Habian pasado unos dias desde el baile de navidad, había quedado en dar mis motivos para la guerra a la otra parte. Ni siquiera habíamos quedado, pero algo me decía que no tardaría en aparecer. El lago brillaba bajo la luz de la luna casi llena, dos dias y estaria en toda su gloria, mi cuerpo lo sentía y se revolvía.

*El lago era territorio neutral, demasiado cerca de hogwarts como para que un combate alertase a los magos, y demasiado lejos como para que no hubieras miradas indiscretas, espere tranquilamente a que llegase.

*Noté esa chispa en mi interior cuando alguien me buscaba, habia visto a guil marcharse y sin apenas darme cuenta, estaba corriendo por el bosque, descalzada y el pelo suelto ya fuera del elegante recogido, aterricé suavemente sobre una rama, justo encima de la cabeza de Guil y me senté balanceando mis pies desnudos llenos de barro y hierba.*
-¿Y bien? ¿Me esperabas por alguna razón romántica?-bromeé.

-Bueno creo que hoy no tienes esa suerte. *Bromee.

-El otro día dejamos una conversación a medias, ¿te acuerdas?, en el baile, me hablaste de sköl.

*Bajé de un salto al oir el nombre de mi hijo*
-No pensé en serio que fueras a querer continuar esta conversación. Realmente sabes algo de Sköll, no?

-Se que no se encuentra bajo mi protección, asi que fenrir seguira cuidandole. Aun asi, parece que los lobos jovenes tienen prelidección por la causa.

*La observo se nota que la reina pierde su altiva mirada cuando las palabras tratan de asuntos tan cercanos a su corazon.

-Quizás pudiera atraerle a mi

*Retrocedí unos pasos, aquello habia nublado mi juicio*
-Eso...sería cruel para Fenrir...no se si deberia...ni siquiera el sabrá que soy su madre...quizás lo mejor esque sega ignorando mi existencia, como ya te dije, siente odio y no predileccion hacia mi..

-Yo no he dicho que volvais a ser una familia, solo que podría atraerlo hacia mi, asi podrías verlo, y saber al menos como es ahora.

*Me quedo pensativo.

-Quizás ni siquiera haga falta que lo atraiga, como ya he dicho son muchos los jovenes que se sienten atraidos por la causa.

-No se cómo agradecerte este gesto...significa mucho para mi...antes de irme...
*caminé hacia el árbol y me apoyé en él mirándo el suelo, con el pie aparté hojas del suelo embarrado y suave para distraerme, para esfumar la angustia*

-Tranquila mi reina, no vayas a perder tu arrogancia delante de tu enemigo. Además todos tenemos que proteger aquello que nos es valioso, a veces ese sacrificio merece una recompensa.

*Sonreí y me senté sobre una pequeña roca, tomé aire aunque no me era necesario*
-No solo hemos venido aquí para hablar de mi, si no también de ti, no?

-De mi, si, ¿que quieres saber de mi?, pregunta que yo te responderé.

-Lo que tú quieras contarme, dijiste que expondrías tus razones asique aquí estoy para escuchar todo aquello que tengas que decir, al igual que si quieres saber algo de mi eres libre de preguntar.
*Miré al cielo, quedaban un par de horas para el amanecer, tampoco tenía demasiado tiempo para irme*

-Los motivos de esta guerra, si, es pura venganza, muchos de los que ahora me siguen perdieron hermanos, padres, e incluso hijos a manos de los cazadores y de algunos vampiros.

-Pero nuestro exterminio pasado, fue provocado por una sola persona, de la cual solo sabemos que es un vampiro. Entregame al que lo inicio todo y quizas podamos ahorrarnos muertes innecesarias.

*Le miré con ojos calmados pero alerta*
-¿Hablas de Viktor? si es de él de quien hablamos e de decirte que está muerto, a manos de Fenrir en la anterior guerra, asique no creo que sea ya necesario.

-No, la persona de la que yo hablo siempre se mantuvo en la sombra, supo esconderse en todo momento de miradas indiscretas. Solo asi se explica que no sepamos aún su nombre. Aun se sigue escondiendo de nosotros.

*Muestro mis dientes por la ira naciente de ese momento y por la cercania de la luna.

-Los rastreadores no han conseguido encontrarle aún.

-Ojalá pudiera ayudarte pero realmente no tengo ni idea de quién hablas, no soy ancestral, soy joven y bastante ignorante del mundo e de decir, si puedo ayudarte a encontrar a esa persona lo haré, eso seguro.
*chasqueé la lengua con rabia, si Viktor no estuviera pulverizado quizás me podría decir algo acerca de aquel misterioso ser, vampiro o lo que fuera, quizás Erick sabía algo acerca de él, pero era tan callado, tan poco partidario de la guerra...su interés era nulo y preferia cosas banales, no sin razón.*

-Te contaré mi historia si deseas oirla, pero no te puedo prometer que me contenga, quizás sea mejor que te prepares por si tienes que correr.

*le miré a los ojos decidida*
-Escucharé todo lo que tienes que contar cobre ti, y descuida que no te te tengo ningun miedo. Soy todo oidos

-¿Cuantos años tienes?, bueno da igual, mi edad son 20 años, bueno, me convirtieron cuando tenía esa edad. Era un joven cazador de criaturas, y lamentablemente una de esas criaturas me cazó a mi. Fui transformado a la fuerza, hace bastante tiempo ya. Conseguí controlarme al menos lo suficiente para pasar desapercibido, y no matar a nadie. Sin embargo dominar al lobo interior es algo tremendamente dificil, en un arrebato asesine a la unica familia cercana que me quedaba.

*Un arrebato de ira surgió en forma de alarido por mi garganta, consigo controlarme antes de que empiece la transformación.

-Estoy bien.... cuando me quedé sin familia opté por crear la mía propia, tuve dos hijos. Sin embargo empezaron a cazarnos indiscriminadamente, estar cerca de las personas que quieres era solo un peligro para ellos. Decidí que la mejor opción era alejarme desaparecer de sus vidas, irme con otros lobos jovenes que vagaban por las tierras escapando de aquellos que los perseguían. Borré la memoria de la madre de mis hijos y desaparecí de sus vidas.

*Otro arrebato de ira, golpeé a un arbol haciendo que saltasen astillas, alaridos de dolor salieron de mi boca, la mano se transformaba en zarpa.

-Cr..... creo..... q... puedo.

*Un grito más humano, y la zarpa se volvió mano de nuevo.

-Hace unas semanas, encontré a un cazador, antes de morir, confesó que todo había sido iniciado por un vampiro, un vampiro que nunca había dado la cara, un vampiro que convenció a todos de que los lobos debian morir, y con ellos sus familias. Todo, me lo arrebataron todo, perdí mi vida, vagué por los bosques acrecentando mi odio, y eso lo provocó un solo vampiro, creeme que ese vampiro morirá pronto y con el todos aquellos que...

*Olfateé el aire, malas noticias.

-Malditos, estos renegados, han vuelto, mi reina será mejor que os aparteis, no me gustaría que unos cuantos lobos renegados os hicieran daño. Tampoco me gustaría que yo os hiciera daño.

*Abrí los ojos como platos, intenté tocarle el brazo para consolarle pero no me atreví, habia empezado a transformarse, también yo olí algo inquietante*
-Pues vayámonos...-pero me apartó de un empujón, antes de caer tuve tiempo de recobrar el equilibrio, me encaramé al árbol y esperé, si habia que pelear lo haría.

*La transformación se había completado, volvía a ser mi yo de 5 metros furibundo y malhumorado que era mi lobo. Un yo simplemente bestial.

*Uno de los lobos renegados salto sobre mí, antes de llegar a donde yo me encontraba salté sobre él, agarrandole y lanzandole hacia los otros. Rugí amenazador en toda mi embergadura, mientras los 7 lobos renegados me observaban. Si querían morir habían encontrado un lugar.

*Todos parecían en principio, interesados por él quizás no habían percatado mi olor porque habia pasado demasiado tiempo junto a el y se habia mezclado su olor con el suyo y el ambiente pero me mantuve alerta por si tenía k intervenir anque viendo a aquel lobo me quedaba claro k no necesitaría de mi ayuda.
pero me inquietaba el exo de k aparecieran asi de repente, ¿ qué razones tendrían?*

*Otro lobo salto hacia mi, lo esquive con facilidad golpeandole en las costillas de la que pasaba a mi lado, el golpe hizo que su trayectora se desviara hacia un arbol, la respiración de ese lobo se hizo entrecortada, no supondría más peligro. Solo quedan 6.

*Dos de ellos empezaron a rodearme, buscandome la espalda para atacarme mejor. Antes de que cumpliesen su objetivo salte sobre uno de ellos, mordiendole el cuello. El lobo que estaba a su lado me pegó un zarpazo en el brazo, la sangre del lobo lleno mi boca y me hizo entrar en rabia. Literalmente sentía como me volvía loco, destrozando miembros y partiendo huesos en una violenta orgía de sangre y destrucción.

*Cuando terminó todo, mi boca sabía a sangre, y tenía decenas de cortes por el cuerpo, ademas de un par de costillas rotas, sin embargo los otros no parecían mas que trozos de carne con pelo.

*Vi un monton de cuerpos desgarrados, y me rei audiblemente, no sabia porqué pero aquella escena me habia resultado completamente excitante, mis colmillos habian salido y me mantuve agarrada a una rama mirándole extasiada, pero sin atreverme a bajar ya que aún estaba transformado y era un claro peligro para mi*

*La luna, la ira, el ataque, todo había desencadenado la rabia, hacia años que no entraba en ese estado la ultima vez había matado a klauss. Aullé como pocas veces había aullado, una mezcla de rabia, ira, trsiteza y emoción.

*Pose la zarpa en uno de los arboles, la cerré clavandola en el tronco. Volvi a destransformarme, estaba exhausto del esfuerzo de controlar mi lobo más que de las heridas de la pelea que no tardarían en curar. Sangraba por docenas de cortes, y tenía un par de costillas rotas. Pero lo que más me preocupaba era haber caido otra vez en rabia despues de tanto tiempo.