Bosque de Volterra

*me acerque a un arbol cercano y me quede de pie echado en el esperando a mi madre para lo que pasaria a continuacion*

Veo que has llegado madre

*Miré a mi alrededor para ver si alguien nos habia seguido, pero mi agudeza me demostró que en aquel bosque estabamos completamente solos, él y yo y los animales salvajes que vagaban por doquier, había viajado desde el Bosque Negro, desde mi palacio al recibir la llamada de mi hijo más pequeño*
-En efecto,querido hijo,¿qué sucede para que me cites aquí? sabes que puedes ir al Cementerio siempre que así lo desees...
*le miré unos instantes*
-¿qué sucede?

Conviertame madre no quiero seguir siendo un simple humano
*dije con una expresion de frialdad en mis ojos verdes*
Que tengo que hacer para que pueda unirme?

*Abrí mis ojos desmesuradamente, sorprendida con una presión inquietante en mis ojos, delante mia mi único hijo humano me rogaba por la terrible inmortalidad*
-Yo debo morderte para unirte a nosotros, pero es una decisión dura y no hay marcha atrás hijo...¿estás seguro de que quieres eso?No quiero verte sufrir, tu tienes la oportunidad de vivir una vida libre y plena hasta el final, siendo como los demás, sin tener que sufrir...

Para que quiero ser libre¿ quiero ser poderoso y inmortal se que es una vida dificil pero no temo a nada ni a nadie *me acerque a ella lentamente*
Asique madre muerdame

*unas lágrimas de sangre recorren mi rostro lentamente, mi cuerpo se quedó atrapado en el cuerpo de una chica de 16 años pero la mente de un vampiro evoluciona con más velocidad, con una absorción del mundo mucho más profunda, y el dolor que sentía por lo que él me pedía se me hacía insoportable*
-Pero...hijo...yo...no puedo, de veras no puedo hacer esto...es demasiado duro para mi.

*puse mis manos en su rostro y le di un suave pero cariñoso beso en su frente*
Tranquila asi podre estar siempre contigo madre tan malo es eso para ti?
*me quite la camisa*
Adelante madre proceda

*Mi corazón latió a toda fuerza y velocidad, sentía cada punzada que me oprimia el pecho con fuerza, él tenía razón, quizás fuera egoista pero le tendría siempre a mi lado, después de perder un hijo perder otro me resultaría insoportable, no habría vida para curarme de aquello.
Me coloqué a una distancia corta de él, tan corta que mi aliendo gélido traspasaba su cálida piel, herizando el vello de sus brazos.
Mis colmillos salieron a una velocidad increible también cegados por el olor a sangre humana que emanaba de su joven cuerpo, y soin darme apenas cuenta comencé a succionar de su cuello la sangre hiviente*

*Sentia como mi sangre brotaba por mi cuello el dolor era agudo pero no queria mostrarlo, sentia como mi madre bebia mi ardiente sangre aun con lagrimas en sus bellos ojos, sabia que aquello le dolia pero queria ser vampiro para que mi madre se sintiera orgulloso del menor de sus hijos... todo por mi madre*

*Con la misma velocidad que le habia mordido, hice un corte en mi muñeca derecha, de la cual comenzó a salir sangre, a la fuerza agarré su cabeza y la moví hasta k sus labios tocaran mi sangre, al principio se resisitió, luego comenzó a beber y una sensación de vacio y placer inundó mi cuerpo durante el rato que él no se separó de mí.
Al rato retiré su cabeza y su cuerpo cayó casi inconsciente sobre la brillante hierba, taponé la herida de mi brazo que enseguida se cerró y me agaché para incorporarle*
-Te sentirás muy fatigado durante unos días, además de que sufrirás dolores porque tu cuerpo basicamente está muriendo por dentro y dejando en funcionamiento los órganos más vitales para la nueva vida, así como notarás la evolución de tu fuerza y de tus sentidos y por supuesto escucharás mas cosas de las que querrías.

*bebi la sangre de mi madre a duras penas... me ardia la cabeza mucho y temblaba un poco en el suelo palideciendome*
Gra.. cias... *dije como pude * te lo agradezco madre....

*Observo como Arthas cae al suelo desmayado, elevo mi brazo hasta mis labios y lamo suavemente la sangre que mana de la herida abierta, que inmediatamente se cierra, después coloco a mi hijo sobre mis hombros y lo cargo hasta el castillo para dejarle en una habitación descansando y para que tuviera un lugar donde acostumbrarse a su nueva naturaleza en absoluto facil*